En los últimos meses estuve viendo todo tipo de falsos documentales para inspirarme de cara a la realización de mi último largometraje enmarcado en dicho género, "Biopic". El más ingenioso y psicotrónico es este mediometraje realizado por el ahora afamado cineasta Peter Jackson en 1995, el año en el que se celebraba el primer centenario del séptimo arte. "Forgotten silver" narra la historia de Colin McKenzie, un visionario neozelandés que fue el verdadero creador del cinematógrafo y que realizó las películas más alucinantes de su época. Sin embargo, su obra nunca llegó a ser conocida en el extranjero y su temprana y trágica muerte lo condenó al olvido.
La cinta narra como el propio Jackson logró encontrar de manera casual muchas viejas cintas que contienen gran parte de la obra de McKenzie y cómo decide restaurarlas para exhibirlas, mientras va investigando y descubriendo nuevas facetas y aspectos del misterioso artista. "Forgotten silver" fue estrenada en la televisión neozelandesa y generó una gran controversia, ya que la gran mayoría se creyó el cuento. Aunque Jackson declaró a los pocos días que todo fue una farsa para homenajear al cine, hasta el día de hoy mucha gente decide creer lo contrario. C'est la vie.
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